cierra su contribución al diálogo por decir: Él es Todopoderoso, al cual no
alcanzamos, grande en poder; y en juicio y en multitud de justicia no afligirá. Lo temerán por tanto los hombres; él no estima a ninguno que cree en su propio corazón ser sabio (Job 37:23-24). Que nos maravillemos también de la tormenta que declara la majestad de Jehová… y su respuesta que viene en la próxima lectura.